Aníbal Mosa conversó a fondo con el diario La Tercera. Detalló como se dio la llegada de su familia a Chile. “Llegamos en septiembre del 73, en Chile vivía parte de mi familia. Le mandaron un contrato de trabajo a mi papá para entrar al país”, recordó.
En el pasado, el puertomontino se ha declarado de izquierda, incluso dijo que Colo Colo es un equipo que va inclinado a esa posición. Comentó el origen de sus ideas políticas: “Mi padre venía de una tendencia política, que es el Partido Baaz, de izquierda, de los trabajadores de Medio Oriente, aunque nunca vino con fines políticos a Chile”, reconoció.
Su identificación con Colo Colo nació gracias a que el primer partido de fútbol que vio, fue uno donde Caszely anotó uno de sus mejores goles contra Emelecy también asume la notoriedad de su cargo. “Afuera, no lo dimensiona, y, adentro, te cuesta dimensionarlo. El equilibrio es estar permanentemente aterrizado. Es un cargo muy expuesto y de mucha visibilidad. Pero también tiene otra parte bien agradable; este puesto puede generar sensaciones de alegría a ocho o nueve millones de personas. O frustración. Pero qué bonito es poder tener ese desafío de poder hacer feliz a la mitad de un país”, comentó.
Tuvo palabras para relatar como se dio la llegada de Harold Mayne-Nicholls. “Se me ocurrióhaciendo bikram yoga. Estaba en eso y el día anterior yo había hecho una lista mental de quiénes podían ser los dirigentes importantes que tiene este país. Necesitábamoscolocar a alguien que sea un aporte, que tenga credibilidad”, explicó.
Se refirió a la posibilidad de un regreso de Matías Fernández.”Lo van a ver Marcelo Espina con Mario para fin de año. Las puertas no están cerradas para nadie, y mucho menos para Matías”.
Avisó que quiere seguir contando con Jorge Valdivia. “Sí, claro. Hemos estado conversando con el Mago. Dos o tres reuniones ya. Es un tema importante, el Mago es importante para nosotros”, manifestó.
Finalmente, comentó que Paredes siempre tendrá un espacio en el club cuando se retire. “Puede partir a Europa a capacitarse uno o dos meses, ser el veedor de los juveniles… Pensé que se le podría abrir la veta de querer dirigir, pero parece que no. La institución tiene hartas cosas y el Tanque tiene su espacio”, expresó