Las maniobras de Aníbal Mosa para recuperar el poder terminaron generando un verdadero terremoto en Colo Colo. Esto porque tras el alejamiento de Edmundo Valladares, ninguno de los representantes de los bloques controladores de Blanco y Negro está dispuesto a asumir la presidencia.
La principal carta para tomar la dirección de la concesionaria es Alfredo Stöhwing, pero no está dispuesto a asumir la alta exposición del cargo y el resto de los directores intentan convencerlo de tomar la conducción.
Otras posibilidades como Fernando Arab o el propio Aníbal Mosa no cuentan con el apoyo suficiente para tomar el mando, y la negativa reacción de los hinchas tras la salida de Valladares, los hace dudar de tomar el fierro caliente.
Ante esta incertidumbre, al interior de Blanco y Negro se comentó la opción de cederle cargos a gente del Club Social y Deportivo Colo Colo. Sin embargo, esto rápidamente fue descartado por Javiera García, una de las representantes de la corporación en la mesa.
A través de su cuenta de Twitter, advirtió que “no aceptaremos ningún cargo. Como señaló nuestro presidente (Edmundo Valladares), no nos interesa el poder por el poder. Nuestro objetivo es un proyecto de gestión que ponga en el centro al pueblo colocolino y para eso no encontramos apoyo”.
De esta manera, el CSD Colo Colo descarta sumarse a un nuevo mandato en las actuales condiciones que muestran nuevamente la inexistencia de liderazgos y un directorio fraccionado.