Tras pasar diez temporadas en Europa, disputar un Mundial y ser campeón de una Copa América, Matías Fernández regresó al continente para insertarse primero en México y después Colombia.
Pudo seguir su carrera en la MLS, pero las dudas sobre su condición física frenaron la opción y terminó recalando en Junior de Barranquilla, elenco al que arribó como estrella.
Su inicio no pudo ser mejor, entró desde la banca y anotó el gol que le dio la igualdad a su club en el torneo colombiano, pero de allí en más su rendimiento fue decayendo. No volvió a anotar, pero tampoco ha sido un jugador de relevancia y a eso se suma que ha sufrido con las lesiones.
En total suma apenas 405 minutos repartidos en siete partidos de 20 posibles, donde fue titular sólo en cinco. Por Copa Libertadores jugó en tres ocasiones, pero una vez fue reemplazado en el primer tiempo.
El bajo rendimiento de Matías, ha hecho estallar a los hinchas de Junior, quiénes en redes sociales no han tenido piedad con el volante chileno, al punto de tratarlo de “jugador retirado” o “decepción”.
La furia surge en el contexto de que Junior quiso apostar fuerte por hacer una buena Copa Libertadores, pero fueron colistas en su grupo y ni siquiera podrán disputar la Sudamericana y vieron como un modesto Melgar les ganó ese cupo.
Aunque no sólo las lesiones y el bajo rendimiento tienen en duda su futuro en el Tiburón. Julio Comesaña asume como entrenador tras la destitución de Luis Fernando Suárez, quién pidió la llegada del ex Colo Colo.
El nuevo DT ya habló sobre Matías Fernández en el programa Planeta Fútbol de la señal Antena 2 de Colombia:“Quiero verlo, estar y hablar con él. No lo descarto, pero para mí es una locura apostar por alguien que ha tenido problemas físicos”, dijo.
Pero la frase que llena de interrogantes respecto a su futuro fue“Yo le voy a apostar a los que conozco, los demás deben ponerse las pilas.Vamos a mirar de qué manera los jugadores que estén disponibles y que no estaban el año pasado nos pueden ayudar”.
El problema es cuánto afectarán sus problemas físicos en su lucha por convencer al nuevo adiestrador, quién buscará sacarle provecho a un jugador que no ha exhibido el brillo de años anteriores.