Felipe Campos y Marcos Bolados fueron los encargados de darle vida al ritual de mojar a su entrenador con la consagración del Cacique en la Copa Chile.

Ambos jugadores empaparon a Mario Salas en medio de las celebraciones, dejándolo completamente mojado con bebida energética y desatando las risas de los jugadores y el cuerpo técnico que rodeaban al estratega.

Sin duda que la alegría reina en el camarín del Cacique con esta merecida Copa Chile ante la U en el Germán Becker.

Mira la secuencia acá: