Si bien Colo Colo venció por 1-0 a Corinthians por la ida de octavos de final de la Copa Libertadores, quedó la sensación de que el triunfo debió ser más abultado.

Y quizás se hubiera dado si el árbitro del compromiso, Wilmar Roldán, cobraba al menos una de las dos manos en el área propia que cometió Corinthians.

Una se dio en el primer tiempo, tras una tole tole donde Pedro Henrique tocó el balón con un brazo y se la dejó a un compañero:

La siguiente fue cuando ya había ingresado Gonzalo Fierro en el complemento. El 11 sacó un centro y Danilo Ovelar amplió la superficie a cubrir con sus cuerpo con un brazo:

Pese a esto, el capitán de Corinthians, Ángel Romero, aseguró que el árbitro los perjudicó al expulsar a Gabriel por un planchazo a Carlos Carmona. Juzgue usted.