Carlos Palacios ha sido uno de los grandes protagonistas de Colo Colo en lo que va del año. Es que, además de lo que hace dentro del campo de juego, fue uno de los objetivos de Boca Juniors en dos mercados de pases distintos. El jugador tuvo grandes chances de partir e, incluso, mantiene una fluida comunicación con Juan Román Riquelme, presidente del conjunto Xeneize.

En paralelo, su nivel futbolístico era cuestionado. “No sé qué le ven”, decían algunos comentaristas, pero la Joya se encargó de acallar las críticas a punta de trabajo, buen fútbol y enfoque en su objetivo. Es que, con el correr de los meses, el futbolista muestra un claro fortalecimiento físico y una pérdida de peso importante, lo que se traduce en un mejor nivel dentro de la cancha.

Pero no sólo en lo físico, sino que también desde la actitud. No eran pocos los que afirmaban que el jugador entraba a la cancha amurrado, sobre todo, tras el fallido paso a Boca Juniors. Y es que, incluso, él mismo abrió la puerta de salida, dejando grandes interrogantes sobre su futuro. Finalmente, el formado en Unión Española dejó atrás cualquier idea de dejar Pedrero, se quedó, cambió la mentalidad y hace celebrar a Colo Colo.

Desde el Monumental grafican este cambio de mentalidad en diferentes situaciones. Por ejemplo, desde hace un tiempo, la Joya llega antes a los entrenamientos con la finalidad de pasar por el gimnasio antes de ir a la práctica habitual con sus compañeros. Así, el oriundo de Renca da muestras de compromiso y, de momento, lo demuestra en la cancha todos los fines de semana.

Carlos Palacios renace en Colo Colo.

Carlos Palacios renace en Colo Colo. | Imagen: Photosport.

Carlos Palacios se muestra como referente de Colo Colo

Junto con lo anterior, el futbolista de 23 años comienza a alzarse como un referente del plantel y a estar en todas. Además de siempre atender a la prensa una vez que finalizan los partidos, da muestras de ser querido por sus compañeros y, él mismo, también les presta su ayuda. Así, por ejemplo, le cedió el penal a Guillermo Paiva para que sume confianza y, si bien lo falló, no dudaría en volver a repetir el gesto.

“Guille me lo pidió, es un 9, necesita el gol. Lamentablemente le tocó errar, pero seguiremos trabajando para que pronto se le abra el arco. Sabemos que los 9 viven de eso. No pasa nada, lo más importante es que el equipo ganó, supo sacar el resultado. Lo cedería de nuevo, si es un compañero que lo necesita no tengo problema”, comentó una vez terminado el encuentro.

Además, llenó de elogios al que se convirtió en uno de sus buenos amigos en el club como Lucas Cepeda, quien fuera el héroe de la jornada en el Monumental. Sobre su desempeño, Palacios se mostró “feliz por él, le tengo mucho cariño, es un gran amigo que hice acá. Trato de ayudarlo. Antes del partido me dio un abrazo y me dijo que diera lo mejor, le dije que estuviera preparado porque cuando entrara iba a marcar la diferencia. Dios lo iluminó de nuevo, es el iluminado de nosotros, así que feliz por él. Que siga así, es un gran chico que le va a dar muchas cosas al club”.