Colo Colo sacó un empate amargo ante River Plate por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores. Si bien en el papel era un rival duro, lo cierto es que el conjunto de Jorge Almirón dio una buena clase de fútbol y mereció algo más que la igualdad. Los analistas están contestes en que el Cacique pudo ganar y en Argentina cuestionan mucho el accionar de los dirigidos por Marcelo Gallardo.

Es por lo anterior que, pese al 1 a 1, las conclusiones para los Albos son positivas. Los hinchas se fueron tranquilos hasta sus hogares con la confianza a tope de lograr un buen resultado en la vuelta que se disputará en Núñez y, así, estirar la gran temporada que tiene al Eterno Campeón peleando palmo a palmo con los otros grandes de América.

Y parece ser que el rendimiento del Popular es un oasis en la gran crisis que vive el fútbol chileno. Con una selección que vive un difícil momento, un Consejo de Presidentes de la ANFP cuestionado, líos dirigenciales en todos los estamentos, el conjunto albo viene a reverdecer laureles y a poner una cuota de esperanza en el sombrío escenario nacional.

Y los méritos son muchos. Primero, porque desde Quilín poco han ayudado al Cacique a competir a buen nivel. La programación de partidos y el calendario ajustado han atentado contra la normal preparación del plantel y, de todos modos, el DT logró planificar de gran forma las semanas con mayor cantidad de compromisos. Así, tras derrotar a Junior, Colo Colo se metió entre los ocho mejores del continente después de seis años y, por tercera vez desde 1997 (en aquella edición, el cuadro de Pedrero llegó a semifinal y quedó eliminado con Cruzeiro).

Jorge Almirón es clave en el momento de Colo Colo. | Imagen: Photosport.

Jorge Almirón es clave en el momento de Colo Colo. | Imagen: Photosport.

Los méritos de Colo Colo para su buen momento en Copa Libertadores

Otra de las razones que explica el hecho de que el Cacique esté recuperando su nivel continental, es la presencia de un entrenador copero. El gran punto negro que tuvo Gustavo Quinteros durante su estadía, fue la triste presentación en las copas, llevándose grandes goleadas, pese a tener un buen plantel. Por eso, la decisión de tener a Jorge Almirón fue un plus y es que, si bien recibió cuestionamientos en un comienzo, llevó a Boca Juniors a la final de la Copa Libertadores 2023.

El siguiente punto clave fue la llegada de Arturo Vidal. El King realizó los esfuerzos necesarios, los cuales fueron correspondidos por la dirigencia (o parte de ella). El otrora jugador del Barcelona le dio un plus importante al equipo, entregando su jerarquía a un camarín que quería dar un paso más allá. Y así fue. Cuando el Rey fue presentado prometió pelear la Copa Libertadores y, de momento, va bien encaminado a cumplir su promesa. Encima, con un nivel superlativo.

Todo lo anterior se vio reforzado a mitad de año. El mercado de pases se abrió y las figuras albas fueron tentadas a dejar el Monumental. Alan Saldivia y Carlos Palacios fueron algunos de los que tuvieron posibilidades de salir y, sin embargo, Blanco y Negro puso de su parte para poder asegurar al grueso del plantel y no desmantelar un equipo sólido.

El fútbol chileno obligado a invertir en refuerzos

La inversión también es importante. Es que, la llegada de Javier Correa marcó un hito en la historia del Cacique, quien se metió la mano al bolsillo para convencer al delantero de Estudiantes de La Plata, actual campeón argentino. Pero no sólo eso, sino que aportaron con más experiencia y aseguraron el arribo de Mauricio Isla, quien pese a su edad, sigue siendo uno de los mejores laterales derecho de nuestro país y sabe jugar esta clase de partidos.

Todo esto confabula para que Colo Colo esté representando de la mejor forma a Chile. Con todas las dificultades existentes, el cuadro albo está vivo en la lucha continental y se erige como un ejemplo para los otros clubes nacionales que también deberían acostumbrarse a estar peleando en estas instancias, pese a la escasa ayuda que se pueda recibir por parte de las autoridades.