Francisco Prieto: Tuvo un par de achiques magistrales a Patricio Rubio pero luego cometió un penal clarísimo (y otro discutible). En el gol de Rodolfo Madrid la pelota va muy centralizada. Fue de más a menos este semestre.
Álvaro Ormeño: Venía con recuperación de 10 días de un desgarro y pese a algunos ripios metió mucho corazón. Una de las mejores de Colo Colo nació de un invento suyo que peleó una pelota “a lo que saliera”, a trancar. Dejó lo que tenía.
Christian Vilches: Bien anticipando, guapo para marcar, correcto en el anticipo y le bloquearon dos cabezazos en ofensiva tras lanzamientos de esquina. Terminó en buen nivel y seguramente será titular en el proceso que arranca.
Luis Mena: El capitán dejó la vida, anticipó, luchó, por ahí se vio sobrepasado y debió cometer algún foul. No sólo es reserva moral sino que además para el campeonato nacional demostró que está en plenas condiciones físicas y futbolísticas. Debe renovar.
Juan Guillermo Domínguez: Entró con un edema al borde de ser desgarro, se la jugó y simplemente no dio más. Da la sensación que jamás se recuperó bien de la lesión que lo afectó en San Carlos. Fue un buen valor durante el semestre y esperamos que vuelva en óptimas condiciones.
Gonzalo Fierro: Trató de luchar por el medio pero se perdió. Su juego es de pasar rápido el balón, no de tenerlo como necesitaba Colo Colo, pero tuvo que ir al sacrificio. Durante este semestre al menos vimos chispazos del Joven Pistolero que conocemos.
Rafael Caroca: Tiene entrega, corazón, pero está corriendo mal la cancha. No es el indicado para momentos complejos, le sobra garra pero le falta mente fría para controlar los tiempos en una zona muy complicada del campo.
Mathías Vidangossy: Un par de enganches, dos desbordes, un remate y no mucho más. Jamás pudo ser el enlace entre los delanteros y la zona de volantes de contención.
Mauro Olivi: Lo mismo que Vidangossy. Individualista, displicente a ratos, no pudo conducir ni habilitar a sus compañeros. Por su bajo encuentro como el del mundialista Sub 20 pasó que Unión Española hiciera y deshiciera con el balón.
Felipe Flores: Desconcentrado, tomó siempre malas decisiones y sólo tuvo un cabezazo que sacó bien Lobos abajo.
Carlos Muñoz: Prácticamente no la tocó. Su rendimiento decayó en los últimos partidos tras el clásico y hoy sólo tuvo un remate débil.
(51″) José Pedro Fuenzalida: Fue de lo más correcto de la cancha junto con Vilches. Tuvo un par de remates interesantes, metió su habitual despliegue físico pero no era el llamado a salvar todo.
(63″) Facundo Coria: Se le notó totalmente falto de fútbol. Con su ingreso se esperaba algún pase en profundidad, remate de fuera del área o tenencia de balón. No ocurrió ninguna de las tres.
DT Omar Labruna: Hoy quizás leyó mal el partido pero no tenía mucho donde echar mano. Con respecto al semestre, devolvió la alegría a los domingos, ganó los dos clásicos, la fase regular, clasificó al equipo a la Copa Sudamericana y todo con un plantel parchado con préstamos y con una pretemporada con el campeonato en marcha. Se ganó el cariño y respeto de la mayoría de la gente con trabajo y quizás para muchos Colo Colo sólo debe ser campeón, pero es justo contextualizar la crítica situación en la que se encontraba el club al momento de asumir el nuevo cuerpo técnico. El Cacique se está reconstruyendo y parece ir, por fin, por senda correcta. Que descanse, se despeje y ahora sí tenga un trabajo armado desde el comienzo, con tiempo, para hacer explotar el máximo potencial posible.