Juan Guillermo Castillo: Hay arquero. Ganó en los mano a mano, seguro ordenando al equipo. Hace mucho que no se escuchaba un arquero de Colo Colo con voz de mando y transmitiendo seguridad.
Paulo Magalhaes: Regular. Despejó hacia el centro un cabezazo que terminó en gol y nunca pudo tomarle la mano a Rodrigo Jara.
Sebastián Toro: Uno sabe que es un gran jugador pero a ratos es muy displicente. Fácilmente se pudo ir expulsado porque cuando le mostraron amarilla, había pegado una patada que ya era para amonestación.
Andrés Scotti: Si bien se nota su liderazgo y que transmite experiencia al grupo, comete errores que preocupan. Joel Soto lo volvió loco y hasta le tiró un “túnel”. Luego falló una tijera para despejar que terminó en desborde de Galván y casi en gol. Si lo pesca Neymar…
Patricio Jerez: Intrascendente por ahora lo del ex “acerero”. No se proyecta mucho y cuando lo hace no gravita. Le cuesta volver a la marca y su zona queda desprotegida.
José Luis Cabión: Partió jugando por izquierda y se perdió. No gravitó en lo absoluto y fue el único reemplazado.
Luis Pavez: Le falta aún para ser el émbolo del mediocampo. Tiene quite y buen pase, pero debe pulirse y comenzar el juego desde su zona. Salcedo le puede arrebatar el puesto.
Rodrigo Millar: Perdido el hombre de Arauco ayer. Tuvo un remate colocado que pudo ser golazo y prácticamente nada más.
Cristóbal Jorquera: Lo del “10” de Colo Colo es extraño. Su calidad es innegable pero a veces cae en unas lagunas eternas. Igual se ingenió para meter un pase que terminó en autogol.
Ezequiel Miralles: Malhumorado e intrascendente estuvo ayer el delantero que está llamado a desequilibrar con su velocidad.
Esteban Paredes: El que más buscó y metió. Tuvo premio con un gol de otro partido.
Lucas Wilchez (55″ por Cabión): Le dio profundidad al equipo y tuvo un gol. Necesita demostrar que puede estar del arranque.
DT Diego Cagna: Debe afinar las piezas con urgencia. El lado izquierdo de la zaga preocupa, entran con demasiada facilidad. Además, debe replantear el mediocampo para darle dinámica porque Jorquera y los delanteros quedan aislados con la falta de juego.